EL SOUL
El soul es un género musical que nace a partir de la unión de elementos de dos géneros musicales anteriores: El góspel y el rhythm and blues, a mediados de la década del cincuenta en Estados Unidos (6). En sus inicios, los primeros temas de soul provienen de canciones de góspel sometidas a una transformación en sus letras, abandonando el carácter religioso, así, “Los alegres y up-tempo cantos góspel, se convirtieron en canciones de soul up-tempo, mientras que las canciones de góspel más lentas se convirtieron en canciones románticas”. (Cuesta, 2017). Sin embargo, el género se sujeta a una transformación en su contenido lírico, pues las canciones de soul ya no sólo tenían temática romántica, sino también de crítica y reflexión social y filosófica.
Algunos de los estilos dentro del género son el “Motown soul”, creado en Motown Récords, que surge a principios de los años sesenta, en donde es común el uso de panderetas, el ritmo compuesto de la batería predominancia en las negras, y el uso de riffs (It takes two, Kim Weston y Marvin Gaye) y el “Southern soul”, del que se derivan otros dos: El “Deep soul”, potente y dinámico, (Think, Aretha Franklin) y el “Memphis soul” (Cuesta, 2017), más lento, y en donde cobra importancia la transmisión de emociones (Back up train, Al Green). También se encuentran otros estilos como el Birmingham soul, derivado de los derechos civiles, el New Orleans soul, el Chicago soul, el Philadelphia soul y el Blue-eyed soul. (El comercio, 2018).
Características musicales generales del soul
A rasgos generales, el soul se caracteriza por el uso de armonía diatónica, acordes tríadicos y dominantes secundarios. Por lo general las canciones de soul se encuentran en métrica 4/4 y 12/8 y sus melodías están basadas en las escalas mayor, menor y pentatónica. Como parte de la influencia del góspel, se puede determinar que el soul conserva el carácter de “call and response”, las palmas y la reiteración de algunas palabras para dar importancia a las mismas dentro de la interpretación. A nivel vocal, el uso de vibrato (ligero o pesado), la improvisación o variación melódica y rítmica de las frases (Cuesta, 2017), y el uso de recursos como belt, twang, crying voice, adornos y melismas también son muy característicos dentro del género.